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«Aquí está el Niño Jesús, el Cristo, el Misterio de la Navidad. Esto es asombroso. Pero de todas las criaturas que estaban allí esa noche, tal vez la más sorprendida fue la vieja vaca. Cuando la vieja vaca llegó a su pesebre por la mañana para comer un poco de paja, se encontró con que estaba ocupado por un bebé. Alguien había puesto una sábana suave sobre la paja y el pesebre se había convertido en una cuna. Lo único que pudo hacer esa vieja vaca fue mirar y mirar al bebé con sus enormes ojos marrones.»

 

 (La Guía Completa de Godly Play—Adviento)