«En Godly Play, la invitación no es a jugar en general sino a jugar con el lenguaje de Dios y de su pueblo, es decir con nuestras historias sagradas, parábolas, acciones litúrgicas y silencios. A través de este lenguaje potente, a través de nuestra práctica reflexiva, a través de la comunidad de personas que se reúne a jugar, escuchamos la más profunda de todas las invitaciones: una invitación a salir a jugar con Dios.»

Jerome W. Berryman (Fundador de Godly Play)